Ve otra pregunta/respuesta aleatoria
Comentario sobre el material del Libro V
Jim: Las primeras preguntas y respuestas de esta sesión se refieren más al mantenimiento básico con el que nos encontramos constantemente al tener que lidiar tanto con los espasmos de dolor artrítico de Carla como con la acentuación de estas dificultades por parte de nuestro amigo de quinta densidad negativa.
Hacia el comienzo de la Sesión 92 del Libro Cuatro de La Ley del Uno, una de las respuestas de Ra fue: «Es necesario que el instrumento elija la manera de ser. Tiene la distorsión, como hemos observado, hacia el martirio. Esto sólo puede ser evaluado y elegido por la entidad». Y al final de esa misma sesión, Ra añadió «El instrumento en sí podría reflexionar sobre algunas palabras anteriores y considerar sus implicaciones. Decimos esto porque la llamada continuada a las energías vitales, si se permite que proceda hasta el final de la energía vital, pondrá fin a este contacto. No hay necesidad de seguir llamando a estas energías. El instrumento debe encontrar la clave de este enigma o enfrentarse a una creciente pérdida de este servicio particular en este nexo espacio/tiempo particular». La última parte del material personal de la sesión 94 consiste en una pregunta de Carla sobre la que reflexionó largamente en relación al acertijo que Ra había presentado en la sesión 92. El acertijo era la forma que tenía Ra de resolver el enigma. El acertijo era la forma en la que Ra mantenía el libre albedrío de Carla y, al mismo tiempo, le daba una dirección de pensamiento que podría mejorar tanto su propio crecimiento como el servicio del contacto a los demás.
Carla: A medida que pasaba el tiempo, jugueteábamos cada vez más con la ropa y demás, intentando maximizar mi comodidad y la duración de las sesiones. Me vestían con ropa de abrigo, toda de blanco, con el edredón blanco colocado de forma que no arrastrara por los brazos, y luego me enguantaron las manos, y el tipo de tubo que se utiliza para ventilar lavadoras/secadoras se colocó sobre ambas manos hasta aproximadamente el codo, para mantener el peso de la funda fuera de ellas por completo. El sólo vestirme para las sesiones era un trabajo. Cuando uno lo recuerda, parece casi gracioso que siguiéramos adelante con tanta perseverancia. Pero en aquel momento, sólo había un pensamiento entre nosotros tres, y era continuar este contacto y aprender todo lo que pudiéramos. Creo que, si volviera a ocurrir, volvería a hacer lo mismo: dar lo máximo de mí. E imagino que Jim diría lo mismo. Sin duda, Don también estaba absolutamente decidido a continuar con las preguntas a Ra. Sentía que era la culminación del trabajo de su vida. Si estábamos algo cansados e incluso maltratados por las condiciones en las que teníamos que trabajar, era aceptable. Y, de hecho, todos sentíamos el cansancio.
Aprecio lo que dicen los de Ra sobre mi don de la fe. Desde que tengo memoria, he disfrutado de esa actitud de fe y esperanza. Puede que sea la razón por la que hoy estoy viva, mientras que Don es un soldado caído en la batalla espiritual. Don era una persona de infinita dignidad, inteligencia y pureza ética, pero siempre un hombre algo melancólico bajo la máscara de cortesía educada, eficacia y encanto profesoral con la que se presentaba al mundo. Se me ha dado mucho en esta vida en forma de regalos, pero este es sin duda el más preciado.
¿Acaso Ra no ofrece una maravillosa perspectiva al ojo miope espiritual, al sugerir que yo sólo miraba lo que aún debía hacer, en lugar de dar gracias por lo que ya había llegado? A menudo he seguido su consejo y he reflexionado sobre los méritos de juzgar como el crítico severo que querría que todo fuera exactamente así. La vida es desordenada, y a menudo las cosas están muy desordenadas, y eso hay que liberarlo, perdonarlo y aceptarlo.
Y el pensamiento final de Ra es realmente una joya. Después de todo, ¿qué es todo nuestro esfuerzo al final, incluyendo este contacto y todo el pensamiento humano, sino una locura vana y vacía? No podemos pasar de la ilusión a la verdad en este cuerpo, en este plano de existencia. Entonces, ¿dónde está nuestro servicio más verdadero y central? No en el hacer sino en el ser, en permitir que el verdadero yo, ese amante de corazón abierto de todas las cosas de la creación, comparta su esencia con el mundo, y permita que el amor y la luz del Uno Infinito pasen a través de él e irradien en la consciencia planetaria. Esa es nuestra verdadera gesta, todos los que hemos venido aquí en este momento para servir: ser, vivir una vida devota y entregada.
(Las preguntas y respuestas publicadas por primera vez en el Libro V se muestran con este color de fondo.)
94.4 Interrogador: Inmediatamente pienso en el instrumento llevando ropa interior larga bajo la túnica que lleva ahora y una cubierta extremadamente ligera y blanca. ¿Esto sería satisfactorio?
Ra: Soy Ra. Debido a la falta de energía física radiante de este instrumento, se sugiere una cubierta más pesada.
Los libros originales de la Ley del Uno tienen copyright 1982, 1984, 1998 L/L Research. Los libros del Ra Contact tienen copyright 2018 L/L Research y Tobey Wheelock
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